Es un hecho que los videojuegos forman parte de nuestra vida cotidiana, videoconsolas, computadoras, Smartphone, tablets, etc… da igual la plataforma usada, todos tenemos acceso a ellas. Hace 20 años (Experiencia del autor), si sabias jugar a juegos eras un bicho raro, un freak, hoy en día, todos en esta sociedad digitalizada sabemos que es un juego y todos hemos jugado a alguno.

Desde aproximadamente 14 años, hasta la fecha de hoy en día y pasito a pasito, los videojuegos se han ido popularizando, extendiendo y lo más importante se han sociabilizado, lo cual los ha convertido en algo normal y que forma parte de la sociedad, del día a día, como los hornos, la televisión, el coche o dar una vuelta por el parque con nuestros hijos.

Los videojuegos han dejado de ser cosa de los raritos, los jóvenes, los aficionados a las maquinitas, etc… y cualquiera juega a ellos, desde el salón de su casa, a cualquier género, hora y desde una u otra plataforma.

En este artículo vamos a dar un pequeño repaso a este fenómeno, que ya no es cosa del futuro, es algo actual y muy presente en el 90% de los hogares de nuestra sociedad.

El impacto positivo en la sociedad.

Existe una gran cantidad de individuos que defienden los videojuegos y cada vez son más, puesto que actualmente está más que demostrado, que bien usados ayudan al aprendizaje y desarrollo de distintas capacidades y conocimientos del gamer (jugador).

La capacidad de concentración, coordinación, lógica, resolución de situaciones, desarrollo de estrategias rápidas, colaboración y cooperación, selección de información relevante rápida, estimulación auditiva y visual, etc… son entre otras las características que son desarrolladas por estos juegos, dependiendo del tipo de juego, del modo de juego y de cuánto tiempo se le dedique.

Es por ello que sus defensores, solemos mencionar que la causa por la cual muchos están en contra de los videojuegos, son principalmente el miedo a la tecnología, el desconocimiento del uso de la misma, el no querer invertir tiempo en el aprendizaje de la misma, el estar arraigado a las costumbres culturas arquetípicas de la sociedad y por lo tanto no adaptarse a los nuevos entornos de ocio, etc…

Pero por supuesto no podemos dejar de ver una parte negativa muy real, en todo esto y que viene dada por el hogar. La masificación sufrida en el tema de los videojuegos y su rápida expansión, unidas a la falta de conocimiento (e interés) de algunos padres o tutores en el hogar, puede dar propensión a una adicción insana en los gamers, lo cual además aporta efectos negativos en el comportamiento de algunos adolescentes, siendo estos propensos a la agresividad, falta de asertividad y bajo rendimiento académico, como otros muchos estudios han demostrado. Pero esto como muchas otras cosas en nuestra sociedad es una cuestión de educación y control por parte de los padres o tutores, los cuales deberían de participar en las actividades de sus hijos y vamos a verlo con unos ejemplos.

Ejemplo 1. El niño va al parque, juega al futbol con sus amigos, los padres de sus amigos y sus propios padres. Aprende el juego en equipo, la diversión, la sociabilización, un reglamento, etc…

Ejemplo 2. El niño juega al World of Warcraft, con sus amigos, algunos padres de sus amigos y sus propios padres. Aprende el juego en equipo, la diversión, la sociabilización, el atenerse a unas reglas establecidas en el servidor de juego, etc…

¿Cuál es la diferencia, entre ambos ejemplos?, dar patadas a un balón y hacer clics de ratón. No existe diferencia, ambos son juegos donde se puede compartir grandes momentos.

Ejemplo 3. Si en el ejemplo 2 (centrémonos en los videojuegos), nuestro hijo juega solo, sin sus amigos, sin adultos cercanos (padres o padres de amigos), etc… tarde o temprano vera que dentro del juego necesita más gente para divertirse, para colaborar en distintos aspectos del juego. Vamos a rizar el rizo, encuentra un grupo de gente que se hace llamar “Destructores de Azeroth” y estos se dedican a ir en grupo atacando al resto de jugadores del servidor, con un sistema jerárquico muy estricto, un largo etc… de características no muy éticas o morales. Si nuestro hijo se une a ellos y va viendo que se divierte mas, aprenderá lo que en este grupo se enseña, la ley del más fuerte (Aunque sea el más fuerte virtualmente).

¿Dónde está el fallo? Por supuesto no es el videojuego, es la educación, el no participar con nuestro hijo en sus aficiones, etc… si le gustara el futbol, los toros, irse de fiesta, los botellones, etc… cosas muy establecidas en la sociedad se le considera al joven, normal, más o menos “bala perdida”, pero normal. Y aquí reside el reto actual de los padres, adaptarse a los nuevos tiempos y las nuevas tecnologías.

Distintos estudios han demostrado que este fenómeno social, el del videojuego ya no se limita simplemente a chicos jóvenes o “raritos”. En España se realizo durante 2009 un estudio, en donde se entrevisto a 974 personas mayores de 35 años, de las cuales el 53,5% (521 entrevistados), jugaban de manera habitual o esporádica a videojuegos. Esto apunta a un futuro mejor, donde se sucederán casos como los vistos anteriormente en el ejemplo 2.

Otros estudios, demuestran las virtudes de los videojuegos, capacidades como el razonamiento en los juegos de estrategia, la orientación espacial en los juegos de 3 dimensiones, que implican medir distancias de salto, daños de caídas, etc…, la capacidad de atención ante determinados estímulos que dan pistas en algunos juegos (Una sobreexposición, también puede ser perniciosa), coordinación visión-motora, pues es necesario coordinar lo que los jugadores ven, con sus reflejos para apretar teclas, sin ni siquiera mirarlas, una cuestión de reflejos y velocidad o la resolución de conflictos y toma de decisiones, en los simuladores como los automovilísticos, simuladores sociales o las aventuras graficas que muestran problemas que requieren de soluciones. Esto es algo en lo que no muchos padres se paran a pensar, pero que está muy demostrado actualmente.

Pero los videojuegos, no solo son buenos para el desarrollo de los jóvenes, también en los adultos se ha demostrado, que sirven para liberar el estrés acumulado en el día a día y por lo tanto mejoran la salud del adulto. Entre los juegos que se probaron están los tipo puzle como Bejeweled, un juego bastante extendido en redes sociales y Smartphone.

Pero al margen de estas bondades o estudios, los pedagogos aseguran que el reto realmente consiste en encontrar la mejor manera de aprovechar este recurso, puesto que como todo invento, herramienta o utilidad desarrollada por el ser humano, mal usada, usada en exceso, etc… puede tener efectos adversos. Se debe tener en cuenta, que se ha de limitar su uso, este uso ha de ser vigilado, el adulto ha de fomentar su uso en relación con valores morales, como el compromiso, la responsabilidad el esfuerzo personal y de equipo, etc… por lo cual lo ideal es no perder de vista estos videojuegos, participar en ellos (Se gane o pierda, se nos dé mal o peor) y así el aprendizaje de los jóvenes será más positivo y responsable.

Las críticas en la sociedad.

Como en otros artículos realizados y que realizare para labuenaimpresión, añadiré la experiencia personal, pues es la mejor manera de ofrecer un punto de vista personal-profesional. En este caso para tratar las criticas que durante años (y que aún existen), mucha gente vierte sobre el tema de los videojuegos.

Los videojuegos al igual que otras formas de expresión audiovisual (La televisión del demonio, en su momento), han despertado una gran cantidad personas o grupos de personas, que consideran que estos son perniciosos, destructivos y no precisamente un bien para la humanidad. Argumentan que el desarrollo emocional y personal, ante tantas horas delante de una pantalla, en universos imaginarios y fantásticos, dan lugar a personas aisladas socialmente, que no son capaces de interactuar con otros individuos de forma correcta. También argumentan, que este tipo de juegos producen ludopatías y adicción, como los juegos tradicionales (Póker, maquinas tragaperras, etc…) y que además fomentan la violencia y los ataques epilépticos, debido a unos gráficos que se mueven de forma demasiado rápida y con colores muy llamativos.

Tengo 37 años, comencé a jugar a juegos de ordenador con un Amstrad CPC 464, cuando tenía 11 años, en otras palabras llevo 26 años jugando a videojuegos, en todo tipo de computadoras y videoconsolas, actualmente hasta en Smartphone.

He jugado a juegos donde encarnaba héroes luchando contra fuerzas infernales.

He jugado a juegos donde podía ser policía o terrorista (Habiendo jugado en ambos bandos) y cuyo objetivo daba igual, el tema era matar a los miembros del otro equipo para ganar.

He jugado en mundos virtuales, donde los jugadores se dividían en dos bandos, alianza y horda, los cuales se odiaban a muerte, hasta el borde del fanatismo (Yo elegía horda, eran más violentos, divertidos y feos).

He jugado a juegos donde tenías que construir y dirigir ciudades, desde 0, hasta tener rascacielos.

He jugado a juegos donde según tus acciones, el final podía ser que destruías a la humanidad o te convertías en su salvador.

Y podría nombrar decenas de juegos de cada estilo, asaltos planetarios, destrucción de bases espaciales, colocación de bombas, ser un asesino oculto en las sombras, ser un bárbaro de espadón en mano y a rajar lo que pilles, ser un dios que protege a su pueblo, ser un soldado al servicio de un imperio, ser el salvador de los pueblos libres, etc…

Pero además, añadir:

He tenido temporadas, donde trabajaba, jugaba al ordenador y si me daba tiempo dormía, obviamente comía y cenaba en el ordenador.

He formado parte de clanes o grupos de gente en la red, MIC, MN, CSIF, GEOS, MIB, Ángeles infernales, destructores de mundos, los invasores, hijos de Thrall, los sanguinarios, ejecutores, ali que veo ali que meo2, etc…

Jugué con mis hermanos pequeños (hermana y hermano), que desde que tienen uso de razón, han visto a su hermano mayor cara a un ordenador, no creo que me recuerden nunca sin PC, he jugado con ellos a starcraft, los sims, diablo 2, warcraft, world of warcraft, etc… y por supuesto, yo supervisaba como jugaban y que hacían, para algo era el mayor.

Para resumir, he realizado durante 26 años, todo lo que es “Criticable” o “Maligno” en este tema de los videojuegos, pero viendo este articulo que estoy escribiendo, he de decir cuál ha sido mi resultado.

Estoy casado y tengo un hijo (No tengo aislamiento social), tengo amistades clásicas y algunas virtuales, conocidas gracias al clan GEOS (Ídem del anterior).

He aprendido gracias a modificaciones que he realizado a distintos juegos, algo de diseño grafico, programación c, HTML, XML y algún otro que no recuerdo, se montar servidores de juego en distintos juegos, editando scripts de configuración con bloc de notas y alguna otra cosilla que se me olvida. Estos son conocimientos, algunos de ellos se estudian cuando realizas algún ciclo o estudio reglado en el instituto o universidad. Yo lo aprendí incluso antes de hacer estudios.

Tengo mal genio, si, pero eso lo he heredado de mi padre, no de los videojuegos. Por supuesto no soy violento, a menos que haber practicado boxeo (deporte físico y no virtual) durante dos o tres años en un gimnasio sea culpa de los videojuegos.

No tengo ludopatía o adicción a los videojuegos, etc… da la casualidad que llevare cuatro años más o menos, sin jugar a nada de forma asidua, puesto que decidí sacarme el título de técnico informático y dedicarme a la informática de forma más profesional. Estudiar y jugar es incompatible.

Jamás he tenido ataques epilépticos, a lo sumo he tenido dolores de cabeza, por estar 14 horas seguidas entrenando junto a los miembros de mi clan (GEOS, actualmente desaparecido), en un juego llamado counter-strike. Esto era debido a que íbamos a participar en el campeonato coca-cola y el premio era dinero en metálico.

En otras palabras y vistas mi experiencia (Conozco a mucha gente como yo en este mundillo), estas críticas (cada vez menos), se deben al desfase generacional, a que los críticos no son capaces de aceptar los nuevos e-sports, etc…

Final y resumen.

Lo que está muy claro es que nueva generación nace y crece con los videojuegos, en un futuro no muy lejano, existirán verdaderos canales televisivos (Existen ya canales On-Line) dedicados a los E-Sports y que si los padres y abuelos de estas criaturitas, queremos educar al respecto y correctamente a estos jóvenes, debemos dedicarnos unas horas a ello.

Bondades, los videojuegos tienen muchas, pero para que las generaciones venideras las aprovechen correctamente, debemos los adultos ponernos al día y esta es nuestra recomendación, jugar al ordenador en juegos multijugador, cooperativos, etc… con nuestros hijos, al menos una o dos horas al día, pero siempre y cuando les pongamos pautas. ¿Has realizado tus deberes?, ¿Has estudiado?, ¿Has sacado buenas notas?

Respuesta si, a las tres.

Opción 1. Pues el premio es fácil, visitemos Azeroth, montemos nuestros corceles y completemos las 3 quests que nos dejemos ayer.

Opción 2. El otro premio, hijo tengo que hacer la cena, ves con tu madre a Azeroth, montar en vuestros corceles y completar las 3 quests que os dejasteis ayer.

Las opciones son muchas, bien dirigidas. Espero que os haya sido útil, GL HF GG.